Los títulos que van dibujando el
ADN de nuestros fracasos, para que cuando empezamos el día nos acordemos de lo
basura que somos para los dueños de los quioscos que sumados algunos llaman la
patria, título pum para abajo para que no nos olvidemos de nuestros porvenires
oscuros, tal vez más claros que el de esos esclavos de lo que creen que son
amos, de poderes temporales que llevan hambre a los confines de la aldea como
al chaco por ejemplo, eso de los quom no es el resultado de las malas
decisiones de este gobierno ni de los gobiernos que estuvieron es el resultado
de lo malo que somos entre todos, los que escriben los titulares de los diarios
sin sustancias, los que miramos impávidos los mismos titulares.
“El paralelo subió otro 3,7%, llegó a $ 10,45 y ya duplica al dólar
oficial” (la nación, 8 de mayo 2013)
illicitum videtur triumpho
legalis, pequeños grandes triunfos de ilegales que parecen legales.
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