Desmitificando; los que somos lo que éramos.

Los que somos ahora lo que no fuimos entonces, muchachos, no sigan igual que siempre, que las cosas han cambiado aunque a ustedes les sigan diciendo que los otarios siguen ahí, acá, o del otro lado como lectores obedientes y espectadores bobos, con nosotros no, probablemente tengamos la cara pero no lo somos por los menos para ustedes que vienen mintiendo desde el fondo de la historia desde Mitre para acá y de todos los aventureros que montaron un diario, una radio, un canal en los últimos años, para ustedes que jugaron con nuestro padres con sus ingenuidades, ellos que jugaron a eso de creerles todo lo que llegaba por las ondas de las radios a lámpara, y a transistores después como ahora llega por fibra óptica, los cuentos de las revoluciones inventadas para cambiar ladrones públicos de los lugares donde se roba, ellos fueron nuestros padres, ahora los viejos somos nosotros, pasó el tiempo, ya no están más ellos estamos nosotros, y a nosotros no nos manejan con titulares espectaculares o frases ostentosas, con historias inventadas como inventa Cortázar hablando de sus rayuelas, con nosotros no van más los cuentos de mañanas diferentes, para que vivamos siempre en presentes insustanciales, en presentes con pasados ominosos y promesas de futuros que nunca llegan y que también al final resultan peores, siempre es peor para nosotros nunca hubo nueva noticias ni el tiempo es una buena noticia porque cuando salimos al circo de las playas llueve y cuando volvemos a la ciudad de la furia hacen cuarenta grados a la sombra, muchachos, con nosotros no, sigan cobrando sueldos altos de mercenarios de la información y las mentiras hagan lo que quieran ustedes y los señores feudales que les pagan, pero con nosotros no, no hay más lugar para engaños, y así vamos preparando a los que nos siguen que, aunque más tarde que temprano irán haciendo una patria diferente, de otras rayuelas diferentes a esos cielos que siempre prometieron y nunca llegaron porque llegan solamente para ustedes y para los patrones que los contratan muchachos, con nosotros no corren sus fábulas del día, repitiendo los saqueos de todos los diciembre, reiterando las malas noticias, nosotros las vivimos a las malas noticias de ustedes, pero las vivimos toda la puta vida de punta a punta, no nos perdimos ninguna pálida, muchos de nosotros peregrinamos por los trueques en los veranos que ustedes disfrutaron de las playas después de dejar incendiada la aldea, no ven más sus fábulas de días inciertos donde el hoy es una entelequia que no existe y el pasado es siempre peor que el hoy que es peor que un mañana siempre mejor que es de otro y nunca nuestro, esos mañanas que terminan siendo peores, por lo menos en sus crónicas que apuntan a que nunca estemos bien los boludos como nosotros, si nosotros les somos funcionales porque constituimos sus mercados y les hacemos de puente con los pobres, muchachos, con nosotros no, ustedes son los que destrozaron nuestro presentes y porvenires contándoles a nuestros padres lo que ellos les creían, así pasamos el facto y el derechos, las cinco monedas Beagle Malvinas las hiperinflaciones el deme dos y todas esas escorias que ustedes seguro no vivieron, en la realidad solamente haciendo los noticieros.