domingo, 29 de diciembre de 2013

Desmitificando; renombrando.



Y sí, alguna vez alguien tendrá que hacerlo, así que por qué no ayudar, entre otras cosas 
¿tendremos el síndrome del guiñol?, 
la mayor parte de los habitantes de esta particular aldea en general ¿tendremos el síndrome del guiñol?, 
¿de ese muñeco de manga que actúa y habla de acuerdo a las instrucciones que recibe?, 
¿somos un poco eso con unos que nos deslumbran que les copiamos todo y les llevamos nuestras riquezas para que saquen réditos, y de acuerdo a esa obsecuencia que nos caracteriza necesitamos un soplo de Aidos esa diosa griega de la humildad de la moderación de lo original?, 
¿somos un poco así y necesitamos repasar a Adler ese discípulo buen discípulo de Freud que no habló de nosotros porque no llegó a conocernos pero que trató varias de las enfermedades que tenemos como otros?, 
ejemplos de estos días: en EEUU hay cortes de energía las explicaciones locales son que se deberán a las inclemencias del tiempo (mucho frío) y no a las inclemencias políticas porque allá a ningún ciudadano se le ocurrirá opinar sin saber si el gobierno invierte en lo que dice o no hace lo que promete, como tiene el rótulo de primer mundo para nosotros las explicaciones son objetivas no subjetivas; 
en la aldea hay cortes de energía las explicaciones locales son que no se deben a las inclemencias del tiempo (mucho calor) sino a las inclemencias políticas (corrupción del gobierno) porque acá a cualquier ciudadano se le ocurre opinar sin saber si el gobierno invierte en lo que dice o hace lo que promete como nos auto calificamos porque alguien nos calificó antes de tercer mundo para nosotros las explicaciones son subjetivas no objetivas, definitivamente por lo menos la mayoría por acá tenemos severamente incorporado el síndrome del guiñol, somos mamarrachos impresentables hablando mal de nosotros mismos justo frente a esos a los que no les importamos.

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