Taras taradas y taradito.

Y seré nomás un taradito con tantos tarados y taradas, primero lo subjetivo por encima de lo objetivo las reducciones a la amplitud las simplificaciones al análisis, estos no son siquiera rasgos en nuestro mentado ser nacional a ver digo bastante seguido pasamos pavoneando de estar en el ombligo de esta gran panza que es el mundo cuando no pasamos de ser apenas pequeñito lunares en la epidermis que es algo más que una barriga estirada, primero lo subjetivo para no ver nada de los otros aunque le opongamos después cientos miles de arranques que llamamos solidarios que son nada más que para dar lo que nos sobra lo que invalida la intención primera, primero las reducciones a la amplitud de decir que a los demás les va así de indolentes que es lo mismo que es misericordia si el caso es propio, primero las simplificaciones al análisis, es más fácil decir que los negros y vagos no se merecen un plan trabajar viendo el árbol antes que el bosque brotado de vivos ricachones que negocian sus pasivos y sus quebrantos que individualmente alcanzarían quizás para financiar otros tantos planes trabajar para morochos que en tal caso lo merecen más que ellos que tapan sus miserias con sus activos fijos.