Taras y tarados.

Los científicos tarados y los divulgadores que son sus extensiones ahora han descubierto que los insectos que andan volando por todos lados – langostas, cascarudos, algunas especies de cucarachas - los que se arrastran – gusanos babosas - y otros parecidos son fuentes inagotables de proteínas que necesitarían urgente los dos mil millones de pobres que diariamente pasan hambre especialmente en lugares de Africa y aunque no la nombren en algunos lugares de América Latina, lo dicen así alegremente en un programa televisivo donde degustan platos preparados por chef internacionales que es de suponer mientras les sirven todas estas pelotudeces a sus comensales les cuentan de los limbos a los que pueden llegar los indigentes que hay en este planeta de mierda gracias a los tarados que piensan que las riquezas fueron dispuestas por dioses invisibles que además crearon la propiedad privada que al final es la consecuencia de la apropiaciones públicas que se fueron haciendo a lo largo de la historia, y que además los pobres y los impedidos que quedan a montones también son una sarta de tarados que pierden las oportunidades que no se les dan a lo largo de todas sus vidas, encontraron la solución en los insectos en vez de pensar en la solución de todas las soluciones que la pobreza se mitiga si se mitigan los enviones de acumular por acumular que tienen algunos como si lo que acumulan se lo fueran a llevar allá adonde van.