Taras y tarados.

Chácharas, por televisión por radios por todos los medios por los diarios haciendo saber a la gente del quilo de pan a 20 pesos, anunciando con bombos y platillos que los tarados ladrones de siempre esos que abren sus negocios con las consigna del ábrete sésamo mientras el sésamos coincida con sus cajas fuertes, anunciando el pan a un precio prohibitivo para meter pánico en los pobres y les siga subiendo el agua al tanque de sus broncas con el gobierno como si el gobierno tuviera la culpa de las corrupciones de los tejemaneje con los precios del trigo y de la harina, cháchara y más cháchara de los patroncitos de estancias con rémoras de señores feudales con memorias de algún bisabuelo contando de la aldea que alguna vez fue granero del mundo mientras los negros laburaran, esos que acumulan desmesuradamente día a día los de espíritus setentistas esos que añoran los años esos en sus peores sentidos cuando cualquiera hacía lo que se les diera las ganas pero siempre ganaban los que ganaban siempre a costa de los que perdieron porque perdieron siempre, cháchara para la gilada para que en todos lados se comente que ya no se puede vivir y después la ocupación hotelera de los lugares de turismo de la misma aldea esté sobresaturada, cháchara, para la gilada, claro que es bueno saber que entre tanta pálida hay tipos buena onda como los que salieron con la alternativa del quilo de pan a 10 pesos ya saldrán analistas y economistas a desmentirlos para que mañana las noticias sean peores a las noticias de hoy, tarados.