Taras y tarados, legislaciones.
La tara o las taras tienen que
ver con que disponemos de una justicia que mencionada así parece una
institución inmaculada cuando lo único que tiene de estos sea tal vez el esmero
que le pone el personal de maestranza para mantener limpios los pasillos de los
tribunales, por lo demás falta mucho para que este nivel de poder optimice su
gestión, los tarados se habrán tranquilizado el otro día cuando se les informó
que no más del 5% de la superficie del territorio está en mano de extranjeros
lo que está dentro de las previsiones de las leyes, lo que no se percataron ni
nos percatamos nosotros que somos los tarados invitados de piedra de siempre es
que esto de los cuantitativo importa menos que lo cualitativo de la cuestión, y
es de lo que tienen que recursos concentran, porque en superficies reducidas
esos territorios que no controlan los residentes pueden incluir recursos
cruciales como reservas de agua únicas e irrepetibles por ejemplo, interesa
entonces la cantidad pero interesan también las cualidades y calidades.
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