Más que en un macondo la realidad
supera a la ficción por acá donde vivimos y más que mágico es un realismo
espantosamente vomitivo ver a nuestra “intelectualidad” bajando a niveles que
ni siquiera se corresponden con la dignidad del que tuvo la mala suerte de
crecer analfabeto, hubo que verlos y probablemente quedo reflejado en todo los
que se escribió, filmó se grabó, por estos días previos a una elección de medio
tiempo, con el objetivo del debilitamiento electoral definitivo de los que
están gobernando ahora, con argucias intrigas de la peor calaña que
directamente no tienen nada que ver con las objetividades que se necesitan par
transmitir consideraciones sobre decisiones certeras o equivocadas, lo que
hicieron las asociaciones corporativas de medio pelo y de las otras también,
para transmitir a la gilada que de alguna forma el lunes siguiente al de la
elección tiene carácter fundacional de un nuevo gobierno que nos salvará a
todos de un apocalipsis que solamente ven los criticones, hipótesis que abrevan
en nuestra ricas historia de cobardes y conspiradores que hicieron buenas
fortunas justamente con esos desde eso que decimos fue nuestra emancipación y
viene siendo una emancipación de los vicos en todo caso.
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