De pronto el sistema te declara
pasivo, sí, pasivo del sistema porque no alcanzarás a distinguir a nadie, nadie
te lo dirá de frente pero todos lo estarán pensando que llegó tu hora que
tienes que dar un paso al costado, todos tienen nombre y se ubican
perfectamente pero hacen como que no se conocen como que no te conocen te
ningunean eso es parte del trabajo sucio que ellos mismos hacen, te vuelven
inútil en plena utilidad, cuando menos lo esperabas cuando menos los esperas,
el propio sistema de pronto te hace invisible de un día para otro de estar
visible te hace inservible, de pronto el mismo sistema de estructuras sociales
residuales y ordenes sociales cerrados, donde las relaciones son con nombre y
apellido y oportunidad es la palabra menos mencionada viene y te pone una
zancadilla virtual como el propio sistema invisible pero efectiva te desplaza,
de pronto advertirás que el sistema es tan perverso que frecuentemente hace
cotizar a la baja la edad de la imputabilidad los avisos de empleo en los
diarios hablan de experiencia pero más sobre límites en la edad para acceder a
puestos interesantes, no hay lugar para los viejos, de ponto pasivo, de prepo,
sin que digas nada el sistema, donde viven los que se las pasan calificando, clasificando, discriminando, opinando, te comienza a quitar lo que eventualmente te dio
como custodia, te volverás de pronto pasivo sin haber dejado de ser activo,
pues que que todos esos que lo forman se vayan a la mierda.
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